viernes, 13 de diciembre de 2013

Oxfam Intermón y el cómic unidos por los proyectos de Cooperación

Portada del cómic "El bote de mermelada"
de Cristina Durán y Miguel A. Giner Bou
 / Foto: cortesía de Oxfam Intermón
La solidaridad no está reñida con el arte, y mucho menos con el cómic. Tal vez por eso, este año Oxfam Intermón ha querido participar en Expocómic con un proyecto diferente: apoyar la Cooperación al Desarrollo a través del cómic. 

De la mano de varios autores y dibujantes, esta ONG está recorriendo el mundo y aterrizando en países como Marruecos, Colombia, Nicaragua o República Dominicana donde la violencia, las desigualdades sociales o los conflictos armados son su carta de presentación.

martes, 19 de noviembre de 2013

Vecinos de Navalcarnero denuncian la privatización de sus viviendas sociales

Vecinos de la Avenida de la Dehesa de Navalcarnero
(Foto: Plataforma Dehesa de Navalcarnero)
192 familias de Navalcarnero temen no poder hacer frente a partir del próximo mes de enero a la subida de hasta en un 95 por ciento de su alquiler social. 

El IVIMA, el Instituto de la Vivienda de Madrid, privatizó el pasado mes de agosto promociones de vivienda pública, primero con la gestora Azora y después con la sociedad limitada Encasa Cibeles, por valor de 201 millones de euros. Una venta de 3.000 viviendas sociales situadas en diferentes puntos de la Comunidad de Madrid, que ahora se traduce para sus inquilinos en la pérdida inmediata de la ayuda de reducción del precio de la renta para viviendas administradas por el IVIMA al pasar a manos de titularidad privada.

miércoles, 9 de octubre de 2013

Una imagen vale más que mil excusas

Muchos, entre los que me incluyo, no conocen la triste realidad que viven los indígenas de México en todo lo referente al disfrute y al derecho de servicios básicos como la educación o la sanidad. Para algunos será “gracias a” y para otros “por desgracia”, pero sea como sea, el pasado fin de semana el periódico La Razón de México con tan sólo una imagen daba carpetazo a un millón de excusas.

El diario abría con la foto de una mujer dando a luz en el jardín de un hospital en México ante la negativa de los médicos a ser atendida. La imagen, de una crudeza tremenda, muestra a Irma López, de origen mazateco, en cuclillas con su hijo aún atado a su cuerpo por el cordón umbilical. Al parecer, y según el periodista Eloy Pacheco, quien publicó por primera vez la foto en la web Voz21, “el centro de salud carece de médicos para atender la amplia demanda de la población mazateca, por lo que ocurren casos como esta”.

La instantánea, que ya ha dado la vuelta al mundo, ha tenido más de una crítica. Según indica el Código Deontológico de la FAPE, sin perjuicio de proteger el derecho de los ciudadanos a estar informados, el periodista respetará el derecho de las personas a su propia intimidad e imagen. Además señala que en el caso de tratamientos informativos de asuntos en los que medien elementos de dolor o aflicción en las personas afectadas, "el periodista evitará la intromisión gratuita y las especulaciones innecesarias sobre sus sentimientos y circunstancias”.


Algunos medios, como ABC, han optado por publicar la imagen parcialmente para evitar herir sensibilidades. Sin embargo, la gran mayoría acompañan sus artículos con la fotografía original. ¿Necesita la sociedad de hoy en día imágenes como esta para pararse y mirar? 

Pues va a ser verdad que una imagen vale más que mil palabras. 

miércoles, 14 de agosto de 2013

“Como agua para chocolate”, versión Mediaset

Primero fueron las Mamá Chicho en los años 90. Luego Crónicas Marcianas, donde la bajada de pantalones “noche sí noche también” de Boris Izaguirre, se quedaba en poca cosa comparado con escenas como la de la periodista del corazón Carmen Hornillos bañándose en un jacuzzi medio en pelotas en pleno plató. Y luego llegaron formatos tipo Aquí hay tomate, Mujeres, hombres y viceversa o todas las variantes de Sálvame (que no paso a citar porque entonces no acabaría este post) con los que creíamos haberlo visto todo en cuanto a escarnio y humillaciones varias. Bueno, pues no. 

Aún había más, lo que pasa que tenía que llegar la temporada baja en términos televisivos (la alta en cuestión de vacaciones) para que a las mentes pensantes de Mediaset se les ocurriera crear un nuevo formato sólo apto para casposos con un giro inesperado en la búsqueda desesperada del alza de la cuota de pantalla: la carnaza. 

Campamento de verano / Foto: Telecinco
Pues sí, Campamento de verano se ha cubierto de gloria aunque lo único que pretendiera fuera cubrir, pero de chocolate, a una concursante en bikini para subir las audiencias. Una escena que muchos medios ya han tachado de machista, sexista y humillante para la mujer, que en pleno directo se niega a tal “jueguecito”, y que el presentador justificaba diciendo que “nosotros lo único que queríamos era endulzarle un poco la noche a Noemí. De hecho, teníamos pensado que sus compañeros disfrutasen también de la sorpresa ayudando a Noemí a desprenderse del chocolate,  incluso a lametazos”. Pero lo mejor no es eso, sino los aplausos enfurecidos del público después de la intervención del conductor, aunque lo que realmente interesa a la cadena son los aplausos de los patrocinadores, que ya han ido saliendo del campamento en fila india después del espectáculo.

El primero en abandonar el patrocinio ha sido Burger King, que mediante un comunicado el pasado viernes en su cuenta de Facebook, alega no querer relacionarse “con ningún formato que contenga actitudes machistas, denigrantes o que puedan llegar a herir la sensibilidad de los espectadores”. El segundo que le ha seguido ha sido Mutua Madrileña, que tras la petición de más de 30.000 ciudadanos a través de la plataforma Hazte Oír, pide a todos los anunciantes, entre los que están ING, Coca-Cola, Minute Maid, Amena y Orange, que dejen de patrocinar el espacio.

Por su parte, el Consejo del Audiovisual de Cataluña ya está estudiando si el programa de Telecinco ha incurrido en la emisión de imágenes sexistas o vejatorias para la mujer. Hombre, es Telecinco, qué quieren…Y se lo dice una mujer.


jueves, 25 de julio de 2013

Deontología vs. Información: una fina línea muy fácil de sobrepasar

Imagen: burbujasmagazine,com
Un acto terrible, como el ocurrido ayer a las 20:41 horas en Santiago (Galicia) en el que, a la hora de escribir este post, son ya 80 los fallecidos y más de 140 los heridos, una treintena de ellos críticos, de un total de 218 viajeros, impulsa instintivamente, casi sin razón, a cualquier periodista a recopilar datos, a saber todo lo que está pasando a cada segundo, sea vía Twitter, Facebook, radio o televisión. Y como no: a compartirlo. 

Muchas veces me viene a la cabeza un momento de la serie Anatomía de Grey en el que una de las cirujanas experimenta un subidón de adrenalina tremendo cada vez que tiene un caso de esos más que grave que llega a las urgencias sin previo aviso. Pues lo mismo nos ocurre a los periodistas cuando tenemos algo "gordo" entre las manos. La sed de información, de saber, de aglutinar datos y darles forma lo más rápido posible es algo natural, e incluso, bueno para la profesión. Esa ilusión, esa ganas, esa vocación. Pero el problema viene cuando la "fiebre del periodista", que digo yo, sobrepasa la fina línea de la ética y la deontología profesional. Y eso, de verdad, no es tan difícil. 

Entrar en el bucle de los datos disparados, las suposiciones, el "se ha dicho", puede hacer mucho daño a las personas que se ven inmersas en una catástrofe como el accidente de tren de Santiago. Por eso, la FAPE ha hecho un llamamiento apelando a la seriedad de los medios de comunicación que, en algunos casos, desde ayer han publicado en sus portadas o emitido en sus informativos imágenes de cadáveres sin tapar, o incluso han presionado a las familias de los fallecidos para conseguir los primeros el dato más siniestro.

"La presidenta de la Federación de Asociaciones de la Prensa de España (FAPE), Elsa González, aseguró este jueves, ante la crudeza de algunas imágenes difundidas por medios de comunicación relacionadas con el accidente ferroviario ocurrido en Galicia, que el periodista debe añadir siempre un plus de responsabilidad a la información que transmite y no vulnerar en ningún caso la ética. En declaraciones a Servimedia, González señaló que algunas imágenes relacionadas con el siniestro en las que aparecen los cadáveres de algunas de las víctimas vulneran claramente la deontología periodística y, de hecho, la FAPE está recibiendo numerosas quejas por ello. 

La presidenta de esta organización destacó la necesidad de que se actúe siempre bajo los principios de ética periodística y respeto absoluto a las víctimas del accidente y subrayó que el periodista no debe limitarse a informar de lo ocurrido, sino que ha de añadir siempre a su trabajo un plus de responsabilidad que le impida vulnerar la deontología profesional. "Nuestra primera obligación es no dañar y después ayudar", recalcó.

Por tanto, insistió en hacer un llamamiento a la vigilancia de editores y periodistas en este asunto y mostró su pesar por la muerte en el siniestro ferroviario del periodista Enrique Beotas." (Fuente: Diario Siglo XXI)


Y es que ya lo decía Gabriel García Márquez, cuando aseguraba que "la ética debe acompañar siempre al periodismo, como el zumbido al moscardón".

lunes, 1 de julio de 2013

1 de julio, ¿Día del becario?


Foto: puntoencuentrocomplutense.es
Cuántos unos de julio de nervios, de no saber muy bien a lo que vas, ni lo que esperas. De  desconocer por completo qué compañeros tendrás, qué podrás hacer, y lo más importante: cómo será tu jefe. ¿O jefa?

El 1 de julio debería ser nombrado oficialmente como el “Día del Becario”. Ese día en el que cientos de recién licenciados, estudiantes de último curso y, ahora por desgracia, requetelicenciados -e incluso doctores- cruzan los dedos esperando que las prácticas que empiezan puedan ser un trampolín hacia el empleo soñado. Y en el caso de los periodistas: de trabajar en el medio soñado. Pero nada más lejos de la realidad. 

Por experiencia propia como becaria eterna hasta hace escasos dos años, las prácticas de los periodistas han pasado a ser un trabajo con todas las de ley encubierto. Si, sí. Con su jornada de ocho horas con una hora -o dos, en el peor de los casos- para comer, pringando fines de semana, y redactando o cubriendo ruedas de prensa como el que más. Trabajando hasta las tantas de la noche sin plus de nocturnidad, y si me apuras sin cotizar a la Seguridad Social

Currándote reportajes que quedan mejor con la firma de tu jefe, y proponiendo temas  para cubrir a los que, si hay canapés de por medio, no te preocupes que ya irá otro. Y todo por un módico precio: 0 euros, o en el mejor de los casos lo que cuesta el abono transportes. 

Pero aun así quedarse sin vacaciones al becario le da lo mismo. Está hecho de otro pasta. Porque es tal la ilusión de ver la firma de uno en una reseña minúscula a pie de página, que es suficiente para seguir luchando por el sueño de poder ejercer la profesión por la que se han sacrificado los últimos cuatro años de tu vida. 

Una vida, la del becario, que ha inspirado innumerables series y películas, eso sí, a costa de las penurias ajenas. Y en este punto tengo que hacerme eco de un artículo que he leído esta mañana del Huffington Post que recluta “Las 15 frases que más odian escuchar los becarios”, ¡y qué razón lleva! 

Así que después de todo esto, mi consejo a todos los periodistas becados, pese a ser aún joven y muy inexperta, es que jamás se dejen pisotear, que dignifiquen la profesión porque sí, ya es suya, y, sobre todo, que disfruten de cada cosa que hagan. Que veranos hay muchos, pero oportunidades muy pocas. Porque ser periodista no es tener sólo un título en la mesa. Ser periodista es una forma de vida que exige 24 horas al día. Así que, a partir de hoy, a disfrutarlo.

martes, 25 de junio de 2013

Nueva red social para los amantes de la fotografía: Picyourlife.com


Llega al competitivo mundo de las redes sociales un nuevo proyecto sólo apto para los amantes de la fotografía: Picyourlife.com. Un punto de encuentro virtual donde, echando mano de “la nube”, tanto profesionales como amateurs pueden crear un perfil con el que almacenar y compartir sus instantáneas con el resto del mundo. Hasta aquí nada nuevo, si tenemos en cuenta la existencia de otras comunidades como Flickr, Instagram o Pinterest. Así que aquí vienen las sorpresas.

Foto: Picyourlife.com
Picyourlife.com ha sabido tener en cuenta las cosas que más echan de menos los usuarios de la red: la privacidad y la originalidad. Por eso, en cuanto a temas de derechos de autor, la propiedad de las imágenes que se suban a esta plataforma son única y exclusivamente de los usuarios. Un tema importante si se tiene en cuenta el último escándalo de la filtración de datos personales de más de 6 millones de usuarios de Facebook. En cuanto a la originalidad, ¿a quién no le ha pasado que almacena cientos de miles de fotos en el ordenador y nunca las vuelve a mirar? Bueno, pues para eso parece que esta red social ha encontrado el antídoto perfecto. Ha creado un servicio de revelado online con el que pasar tus fotos a papel o hacer un regalo de esos que se llevan tanto ahora y que hacen de tus fotos el mejor recuerdo.

Pero para mí lo mejor de todo es su blog, donde podemos encontrar tanto noticias, como entrevistas a fotógrafos o información sobre concursos o exposiciones a las que acudir a coger ideas. 

¿Competencia a la vista?



domingo, 23 de junio de 2013

Lo que ha unido Google que no lo separe Merkel


A partir del próximo 1 de agosto los medios de comunicación alemanes lo van a tener difícil para hacerse visibles en la web. Entra en vigor una nueva ley en Alemania que establece que el gigante Google tendrá que pagar por mostrar a través de su aplicación Google News contenidos de los medios digitales del país. Y es que el poder que ejerce la canciller Angela Merkel a nivel internacional parece que no tiene la misma influencia sobre el rey de los buscadores en Internet, que se ha negado a pagar, y que ha asegurado que tan sólo indexará los contenidos de los medios que autoricen expresamente su aparición en los resultados de búsqueda de su famosos servicio de noticias.

La polémica está servida con una ley que prevé proteger los derechos de autor, no sólo de medios de comunicación digitales como diarios y revistas, sino también de blogs y otro tipo de de agregadores de noticias.

Así que poco tiempo les queda a los editores alemanes que esperaban conseguir así ingresos por la difusión de sus contenidos, para decidir qué hacer: seguir con el juego del gigante o acogerse a una ley que, por el momento, les perjudica más que les beneficia, ya que, según Google, su servicio de noticias genera 6.000 millones de visitas al mes a editores de todo el mundo, y de manera gratuita.

Por su parte Google emitía el pasado viernes 21 de junio un comunicado a través de su blog en alemán en el que asegura cambian las reglas del juego para que no haya malentendidos. Con ayuda como no de Google Translator, sabemos ha dicho esto, textualmente:

“Hace unas semanas se aprobó una ley en Alemania (…) que ha hecho que se haya introducido un nuevo sistema de confirmación con el que ofrecemos a los editores alemanes otra manera de comunicarnos si permiten que su contenido se muestre en Google News. Esta nueva declaración es un anexo a las posibilidades técnicas ya existentes para determinar la aceptación o no de la aparición de los contenidos en nuestros servicios, tales como la herramienta robots.txt, junto a  otros motores de búsqueda y servicios de Google. En los demás países vamos a mantener el  proceso actual: si un editor publica sus contenidos en la red se incluyen directamente en Google News. Si, por el contrario, un editor no quiere aparecer en Google News puede utilizar diferentes opciones (robots.txt, tags) para evitar la indexación de Google, o simplemente puede indicar que no se incluya su contenido. Esta es la mejor manera de garantizar que la totalidad de las publicaciones estén representadas en nuestro servicio, y no sólo las que tengan determinados recursos administrativos o el tiempo necesario para tales gestiones”.

De esta manera comienza la cuenta atrás. ¿Quién se subirá al carro de Google antes del 1 de agosto?

miércoles, 22 de mayo de 2013

"Desahuciados de por vida"

Tras dos meses de duro trabajo, aquí está por fin el resultado. Un reportaje de 27 minutos en el que explico de la mano de afectados y plataformas ciudadanas la lucha de un colectivo, los desahuciados, que intenta frenar una violación sistemática de los Derechos Humanos cuando, día tras día, se siguen llevando a cabo ejecuciones hipotecarias injustas. 




Sólo por dar algunos datos:

- Desde el año 2007, 416.975 familias han perdido sus casas. Alrededor de 145.000 lanzamientos más que los ofrecidos por los datos oficiales. Sólo en el año 2012, 76.274 familias se vieron en la calle.

- Del total de viviendas expropiadas, cerca del 75% eran primeras viviendas, siendo el caso de la Comunidad Madrid el más sangrante: el 90% de las familias en proceso de desahucio sólo tenían en propiedad la casa de la que les iban a echar.

- Pareja de unos cuarenta años con uno o dos hijos. Es el perfil del desahuciado en España. No existen registros oficiales que certifiquen el número exacto de viviendas expropiadas. Ni Servicios Comunes ni el Consejo General del Poder Judicial se ponen de acuerdo. Ninguno de ellos diferencia entre lanzamientos de hipotecas o alquileres, ni indica los desalojos producidos sin orden judicial, ni tan siquiera detalla los menores implicados en cada proceso.

Espero que remueva conciencias. 

domingo, 19 de mayo de 2013

La portada de Página/12 dedicada a la muerte de Videla deja sin palabras a la opinión pública


"Brillante", "brutal", "increíble" o "espectacular". Así han definido muchos a través de las redes sociales la portada que publicaba ayer el diario argentino Página/12 dirigida íntegramente a la muerte del exdictador Jorge Videla, y que fue diseñada por Martín Moreno y Maxi Sánchez Correa, dos profesionales del marketing que veían como su creación daba la vuelta al mundo en unas horas a través de Facebook y Twitter, y como poco después el diario argentino les pedía la cesión de los derechos para abrir con la imagen.

En mi opinión debería pasar a la historia como una de las mejores portadas de diarios del siglo XXI. Y es que, como se suele decir, en ocasiones "vale más una imagen que mil palabras". 

Haciendo una metáfora de la vida y de la muerte con los colores blanco y negro, la portada de este diario juega además con las letras del apellido del exmandatario de una manera más que sutil. 

Separadas por una fina línea blanca en un fondo completamente negro, se puede leer en blanco en la parte superior la palabra "Vida", mientras que más abajo, en negro  y en un fondo blanco leemos "El". Dos palabras que unidas forman "Videla", y que representan, por un lado, la vida que deben seguir todas aquellas personas que siguen sin saber dónde están sus padres, sus hermanos o sus bebés robados, y la muerte, la de un tirano que -tal como representa la portada- ya está en un foso y bajo tierra.

jueves, 25 de abril de 2013

Hackeada la web de 13TV coincidiendo con el 25A

Coincidiendo con la convocatoria del 25A "Asedio al Congreso", y todo ello con que en España ayer se conocía la cifra de la EPA que sitúa ya en 6.202.700 el número de desempleados y la tasa de paro en el 27,16%, los medios de comunicación vuelven a jugar un papel privilegiado: el del juicio paralelo y los editoriales a tutiplén. 

Algo que parece ha pasado factura a la web del canal 13TV, que poco después de comenzar uno de sus programas estrella, "El cascabel al gato", se ha encontrado con su portal hackeado y con una protagonista de excepción: la secretaria general del Partido Popular, María Dolores de Cospedal ataviada al "más puro estilo español" con tricornio, pistola en mano, y con un mensaje de Anonymous vía YouTube con el titular "La 9 a los líderes del régimen español". 

No sabemos si esto se deberá a la línea del canal o a las opiniones de los contertulios vertidas durante el programa del señor Antonio Jiménez. Pero lo que sí está claro es que los medios de comunicación están para informar, también para opinar, pero jamás para crear juicios paralelos que supongan la estigmatización de una sociedad, la española, y de unos ciudadanos que hoy ejercían su derecho a la manifestación frente al Congreso de los Diputados de Madrid, y que en canales como 13TV han sido definidos como "gente con ganas de liarla" o "cuatro sacamantecas". 

Otras páginas web también han sido pirateadas, como la del propio Congreso de los Diputados según informaba el diario El País.

sábado, 6 de abril de 2013

Musulmanes + paliza + menor = titular asegurado


La semana pasada saltaba la alarma por la publicación de unas imágenes grabadas con un móvil en el que se veía la agresión que sufría un menor de 13 años por parte de un profesor en la Residencia de Estudiantes Marroquíes Musulmanes de Melilla.

Imagen de Elmundo.es 26/03/2013
Evidentemente los medios son lo que son y la noticia es lo que es: musulmanes + paliza + menor = titular asegurado. Pero ese es otro tema. La pregunta en este caso es otra: ¿hasta qué punto las imágenes de un menor al que se le está agrediendo son legítimas para conseguir el titular?

Indagando en la red encontramos que ya en el año 2007 la Asociación Pro derechos del Niño (PRODENI) condenaba la emisión de las imágenes en televisión de la paliza al menor de A Coruña grabadas también con un teléfono móvil. En concreto, y en declaraciones a Europa Press, José Luis Calvo, portavoz de PRODENI, aseguraba que "no sólo no se regula lo que los adultos hacen, sino que además ahora trasladamos lo que los niños copian de los adultos para insertarlo en los medios de comunicación", considerando que tales acciones "nunca deben ser emitidas".

Y otro dato. En el año 2010 se volvía a dar otra circunstancia parecida, pero en este caso con sentencia firme. La Sala Primera del Tribunal Supremo dictaminaba una sentencia que delimitaba la fina línea que separa el derecho a la propia imagen del derecho a la libertad de información, cuando el problema que está sobre la mesa es la protección del menor.

En concreto, y según publicaba en su día Iurismática.com, el periódico “La Opinión de Granada” publicaba el 6 de abril de 2004 una noticia que decía: “Al Qaeda amenaza con convertir a España en un infierno. Juramos por Alá que haremos fluir vuestra sangre como ríos”. Una información a la que acompañaba la foto de una menor señalando la puerta de la casa donde, presuntamente, se escondía el grupo terrorista. Días después, el padre de la niña prohíbe al periódico utilizar la imagen de su hija. Pues bien, en la edición del 18 de agosto del mismo año vuelve a publicarse dicha foto, eso sí, ahora con los ojos de la menor difuminados (que no le hace menos identificable).

A la demanda interpuesta por la familia de la niña en relación al Derecho al Honor, a la Intimidad y a la Propia Imagen, el periódico contestó defendiéndose en base a 2 puntos.

Primero alegaron la veracidad de la noticia y su relevancia pública, algo que determinaba así su protección al amparo del art. 20.1. d) de la CE sobre la libertad de información. El planteamiento se desestima porque la protección a la menor convierte en irrelevante la alegación efectuada. En segundo lugar alegaron ser un accidente la aparición de la menor en la fotografía. De esta manera pretendían que se aplicara la excepción a la existencia de intromisión ilegítima del art. 8.2.c), al que se remite el 7.5, ambos de la LO 1/1982 EDL1982/9072. Algo que tampoco funcionó al no ser una inclusión secundaria o circunstancial*.

Una sentencia que dejó claro que la publicación de imágenes de menores en medios de comunicación sin autorización puede ser un daño a la imagen digno de juzgar y sentenciar. 

Por lo tanto, ¿estaría justificada en el caso del alumno de Melilla la emisión del vídeo de la paliza? ¿Prima la denuncia social, el derecho a informar, frente al perjuicio de la intimidad de un menor? ¿Necesita el ‘cuarto poder”, en según qué casos, sacrificar el honor por el derecho, ya no a informar, sino a hacer saber?

Me quedo con la duda.

*Todos los detalles del caso de “La opinión de Granada” en http://www.iurismatica.com/el-derecho-a-la-imagen-del-menor-y-los-medios-de-comunicacion/



sábado, 16 de marzo de 2013

ENTREVISTA. Mayte Carrasco: “Aquí no tenemos prisiones, tenemos tumbas”


Son las cinco de la tarde, y hemos quedado con Mayte Carrasco en la Casa Árabe de Madrid con motivo de la conferencia "¿Hacia dónde va Siria? Dos años de conflicto a debate" en la que ella participa. De Siria, de Malí, de las revoluciones árabes, del periodismo y del miedo hemos hablado con esta reportera de guerra que no duda en contar las cosas como son, pese a que en momentos parezca que la realidad supera la ficción.




Me gustaría empezar con una frase que he cogido de tu página web, en la que cuentas en relación a tu viaje a Malí: “El ejército francés (…) nos embarcó en un avión para cubrir en Tombuctú el sábado pasado el baño de masas del presidente Hollande. (…) Supongo que París no quiere imágenes de ‘barbudos’ muertos dando la vuelta al mundo”. ¿Se intenta manipular a los periodistas que estáis en medio de un conflicto?

En el caso de la guerra de Malí ha sido clarísimo que había una voluntad de trasladar una imagen de una guerra sin muertos. De hecho, han impedido el acceso a la prensa internacional a las zonas de combate. Sólo hemos podido acceder y cruzar los check point infranqueables del ejército maliense atravesando la Sabana, o incluso a través del río Níger. El acceso libre eran sólo cuatro o cinco días después de los combates, cuando ya habían limpiado las calles de cadáveres, cuando apenas podíamos hablar con las familias. Para mí está muy claro que el ejército francés, con ayuda del maliense, ha impedido el acceso a la prensa extranjera para hacer de esta una guerra invisible, sin muertos.

Se dice que "la primera víctima de la guerra es la verdad". ¿Intentan los gobiernos sumidos en conflictos armados vender propaganda a los periodistas?

Depende de la guerra. Todas son distintas y en cada una hay un grado de censura y de propaganda. Por ejemplo, en las revueltas árabes había mucha propaganda, tanto de la parte de Gadafi como de la de los rebeldes. En Siria, cuando hablaba con los activistas del media center de Al-Qusayr, eran muy sinceros. Decían: “nosotros no somos periodistas, somos activistas y vamos a contar sólo nuestra parte”. Y eso es muy normal porque no son comunicadores. Yo cuando voy a un conflicto intento cubrir las dos partes siempre. Por ejemplo, en Libia pude estar un mes con un visado bajo el régimen de Gadafi, cuando aún estaba vivo. En Siria ha sido completamente imposible, porque una vez que has entrado de forma clandestina ya temes por tu vida. Y pedir un visado es algo muy peligroso, porque ya te conocen, además de que han hecho una lista negra con los periodistas que han entrado de forma clandestina. Algo que incluso envían al Consejo de Seguridad de la ONU para que tome medidas contra nosotros. La verdad que todo eso es una pena, y me gustaría poder hablar con las familias sirias y saber qué información les está llegando. Hay mucho desconocimiento por parte de uno y otro bando. Por eso me gusta contar las dos partes de la historia.
 
Como buena periodista…


Como debemos...


"Cuando preguntamos qué iban a hacer con un desertor nos dijeron: 'aquí no tenemos prisiones, tenemos tumbas'"


Has escrito un libro en el que narras lo que viviste en tus dos viajes a Siria. ¿De qué hablas en él exactamente?

“Estaré en el paraíso”, un e-book de venta por Internet, es una narración en la que explico, sobre todo, el último mes y medio que he pasado en Siria. Un viaje en el que entré al país clandestinamente en febrero de 2012, donde caían quinientas bombas al día en seis kilómetros cuadrados, donde tuvimos que entrar por las cloacas para poder acceder y por donde huyó mucha gente, pero también murió un centenar de personas al día. Después volví este verano y las cosas habían cambiado mucho. Yo en febrero ya vi que iba a haber un cambio, en el sentido de que había muy pocas katibas, brigadas entonces, y donde los yihadistas iban a empezar a venir. También estaba el tema del dinero de los radicales. Ya entonces se sentían muy abandonados y pensaban que si Al-Qaeda era el único que les ayudaba, ¿por qué no iban a aceptar esa ayuda? Y lo mismo de los Hermanos Musulmanes o de los salafistas, porque si tienen que disparar porque les están disparando, para ellos, es la defensa de los suyos.

En estos momentos hay dos niveles en Siria. Está el nivel de la gente que ha cogido las armas y que se están dejando la vida por la libertad, por librarse de un régimen dictatorial que les oprime desde hace décadas. Y luego está el segundo nivel, que es el de injerencia interna y externa. Interna es en el sentido de los radicales que pueden manipular para llevarse un crédito político en el futuro. Y externa, de radicales externos, que tratan de, a través del dinero, manipular al Ejército Libre Sirio y obtener otros beneficios en el futuro. En este punto están los países fronterizos que quieren también jugar sus cartas y mantener sus propios intereses como Irán e Israel.



Llegados a este punto, ¿siguen habiendo desertores que intentan salir del ejército de Al-Assad, o el miedo por sus familias y por sus propias vidas es más fuerte?

Hay mucha confusión. Cuando estuve allí, dos desertores que se habían unido al Ejército Libre Sirio me explicaban que no tenían ninguna información. De hecho estaban encerrados en sus cuarteles, no les habían dado ni vacaciones y no sabían que pasaba con sus familias. No tenían contacto con la realidad, porque sólo les dejaban ver el canal Addounia y escuchar la radio estatal. Por lo tanto, sólo les llega la propaganda. Muchos de ellos habían desertado porque habían escuchado en alguna ocasión una grabación que una gente de Al-Qusayr había decidido poner por las noches contando las hazañas del Ejército Libre Sirio, muchas veces, incluso algo exageradas. Pero ahora muchos de ellos tienen miedo a abandonar. Y eso también es porque ha habido muchos traidores que se han pasado al otro bando, al Ejército Libre Sirio, como desertores que han acabado siendo informadores shabija, y que han terminado ejecutados.

Yo he visto dos casos con mis propios ojos. A uno que le pillaron hablado por teléfono anunciando la posición de un comandante y que se llevaron a ejecutar delante de mí. Y a otro chico que nos había denunciado a los shabija porque era hijo de uno, que interrogaron varias horas en un cuarto de baño desnudo, y que, cuando preguntamos qué iban a hacer con él, nos dijeron: “aquí no tenemos prisiones, tenemos tumbas”. Y es que sabemos que el Ejército Libre Sirio no tiene muchas cárceles porque tiene que moverse constantemente, por lo que si pillan a algún desertor, y desconfían de él, lo ejecutan.

Después de todo esto, ¿cómo se prepara un reportero de guerra?


Es muy difícil prepararse para una guerra, sobre todo para la de Siria. Yo trato de tener la mente muy abierta y de pensar que todas las guerras son distintas. Por ejemplo, la de Siria es muy diferente a las otras revoluciones árabes que he vivido. Es Oriente Medio, es otra mentalidad, es otra cultura incluso, es otra historia, tienen una identidad nacional también distinta. Por eso yo para Siria me preparé intentando conocer el país, a las personas, hablando con los civieles y con los combatientes. Tratando de comprender qué está pasando por sus cabezas, por qué están luchando y cuál es su objetivo real.

Sobre lo que nos llega a nosotros en Occidente a través de los medios, ¿crees que hay una idea estereotipada del islam y de los musulmanes a través de estos conflictos?

Creo que los medios estamos contando muy mal, no sólo las revoluciones árabes, sino todo lo que viene del mundo árabe y del mundo musulmán. Para empezar hay mucha confusión sobre lo que es árabe y musulmán. Se habla de Afganistán como si fuera un país árabe, y para nada. Creo que metemos en el mismo saco a todos estos países porque ponemos esas noticias de treinta segundos en las que contamos siempre un atentado suicida, donde detrás hay un grupo terrorista que todo el mundo concluye que es Al-Qaeda. Donde hay imágenes sanguinolentas. Y la gente en treinta segundos no puede comprender la complejidad que hay detrás. Estamos dando sólo imágenes de choques en la Plaza Tahrir, de cuando hay sangre. Sólo interesan las noticias cuándo impactan, pero no cuando importan. Y lo que importa es el contexto, por qué se producen esas revueltas y cómo terminan. No contamos la reconciliación, que la hay. Y si eso no fuera así, transmitiríamos una cultural de la paz y no de la violencia.


"Parece que la información internacional sólo puede estar teñida da la cultura del 'boom' y del 'clic'"


 

Y, ¿por qué no se cuenta? 

Porque en estos momentos sólo interesa la sangre, lo que impacta. Parece que la información internacional sólo puede estar teñida da la cultura del “boom” y del “clic”. El “boom” es cuando te ponen un “ratatatata” [un tiroteo] en la televisión o un “clic” en un titular morboso. Como pasó, por ejemplo, en Elmundo.es cuando uno de los titulares más leídos fue “Le cortó los testículos, se los metió en la boca y le cosió los labios”, que se refería a la dictadura Argentina. Eso va a captar la atención del espectador, pero no vamos a estar informando. Estamos en un momento de mercantilización de la información, donde parece que lo que importa es la publicidad y todo lo sensacionalista.




Centrándonos en los medios, muchas veces leemos en la prensa “terrorismo musulmán”, “extremismo islámico”, ¿es correcto que estos conceptos siempre vayan juntos?

Esa es una consecuencia de la llegada de las nuevas tecnologías, las TIC. La llegada de Internet ha hecho mucho daño al periodismo, por la inmediatez y por la simplificación. Antes las noticias en televisión eran dos minutos, y ahora en un minuto o treinta segundos tienes que contar todo desde Trípoli. Y no se puede contar en medio minuto toda una revolución árabe, porque no te puedes meter a explicar que no sólo hay talibanes en la insurgencia afgana. Por lo tanto, al final acabamos diciendo "talibanes" como si todos los talibanes fueran la insurgencia.

El pasado martes 5 de marzo estuviste con el fotoperiodista Samuel Aranda en el coloquio “Friends of Talent”, y recuerdo que hablasteis de la necesidad de acotar el término “terrorista”


Se usa mucho la palabra “terrorista” o “dictador”, porque moralmente puedes pensar una cosa, pero de cara a la opinión pública, evidentemente, tú no puedes decidir quién es un terrorista. Hay muchas definiciones sobre terrorismo. De hecho, los grandes organismos internacionales no se ponen de acuerdo. Y luego está el terrorismo de Estado. ¿Lo practica Al-Assad contra los civiles? Una cosa preciso en "Estaré en el paraíso", y creo que es muy importante. Quien está masacrando a mujeres y niños en estos momentos es el régimen de Bashar Al-Assad. Y eso es una enorme diferencia entre un bando y otro. El Ejército Libre Sirio puede ejecutar a los traidores, matar a los soldados del enemigo, no tener prisiones. Pero quién está masacrando a gente inocente, con cercos, con tanques, porque lo he visto con mis propios ojos, es el régimen de Bashar Al-Assad.

Estas revoluciones árabes que tienen en lugar en países de mayoría musulmana, y sobre todo entre los jóvenes, ¿son movimientos sociales y políticos, o religiosos?

Yo creo que ellos son musulmanes creyentes, y la religión juega un papel más importante en sus vidas que en la nuestra. Además, en esos países la única oposición que ha existido durante mucho tiempo ha sido una oposición religiosa que les ha ayudado, y que ha sido un sustituto del Estado a la hora de paliar las necesidades que tenía la población. Que detrás haya un sentimiento religioso más profundo, yo creo que sí, pero no radical. No creo que exista un sentimiento radical entre la población más joven egipcia, o tunecina, o libia. Simplemente esos partidos políticos les pueden ofrecer cosas distintas a las que han visto en las últimas décadas. Y se puede confundir ese laicismo con una conducta violenta y más radical que la que ellos pueden ver en una religión que profesan de forma libre, a lo mejor sólo porque rezan cinco veces al día. ¿Y qué? Es como si yo el domingo decido ir a misa.
 
El otro día leí un titular que decía “Miles de magrebíes cruzan la frontera de Ceuta al grito de Allah hu akbar”. Entonces aquí la gente debe asustarse y pensar que vienen con machetes. Allah hu akbar es una frase que yo he escuchado a la gente rezar para cruzar una calle donde había francotiradores. No iban a luchar, simplemente era un rezo para encomendarse a Dios en ese momento tan difícil. Yo también he rezado, y hacía mucho que no lo hacía, cuando escuchaba las bombas a mí alrededor. ¿Y me van a decir por eso que soy una radical? Es un sentimiento humano si has creído alguna vez en algún Dios.



"Cuando estás todo el día en el hospital viendo muertos te das cuenta de que aquello es una ruleta rusa"

 
Dices que has rezado alguna vez y que hacía mucho tiempo que no lo hacías. ¿Has pasado miedo de verdad en algún momento?

He pasado el mismo miedo que pasa la población civil. Cuando entras en esas ciudades cercadas, como en Al-Qusayr, donde hay setenta tanques de Al-Assad, o te caen bombas en cualquier momento del día o de la noche, o estás todo el día en el hospital viendo muertos, te das cuenta de que aquello es una ruleta rusa. Imagínate la sensación que tienen los civiles que están allí dentro y que saben que es una lotería, que pueden morir en cualquier momento. Es una sensación de miedo que compartes con la población que se queda dentro. Porque, al fin y al cabo, los periodistas nos vamos. Y ahora mismo yo estoy aquí disfrutando de una vida magnífica en Occidente, y que no apreciamos. Pero ellos se quedan allí dentro tratando de sobrevivir y de trasladar al mundo a través de nuestras cámaras, con mucha impotencia, lo que están viviendo.  

¿Crees que los medios en Occidente presentan la situación de Siria de una manera, tal vez, un tanto hipócrita? ¿Se da más importancia a lo mal que está España, a los sobres de Bárcenas, y no tanto a las masacres que viven países como Siria?

Bueno, yo también he aprendido que es muy difícil  no entender un conflicto si nunca lo has vivido. Aquí desde luego tenemos muy poca memoria. Se nos ha olvidado que también tuvimos una guerra civil, que fuimos víctimas y verdugos. Hemos entrado demasiado rápido en una fase distinta que nos ha llevado a la pérdida de valores. Cuando voy a los países árabes echo de menos muchas de las cosas que nosotros hemos perdido. Por ejemplo, creer en la familia. Aquí estamos yendo hacia el individualismo, hacia el enriquecimiento material y no personal.

Recuerdo que en la plaza Tahrir, se había ido Mubarak esa noche, un hombre me preguntó: “¿de qué país eres?”, y yo dije: “soy de España”. Y entonces me abrazó, y me dijo: “qué bien, ya somos como vosotros”, y pensé: “espero que nunca seáis como nosotros”. Él se refería a la democracia, y unos meses después yo me encontraba en la Puerta del Sol con un cartel, en el 15-M, con una plataforma que creamos que era "Periodismo Real Ya", y me acordaba de aquel hombre, y esperaba que no obtuvieran una democracia para estar varios años después reclamando que sea una democracia real. Porque lo que está pasando en España es muy grave, y los medios de comunicación son ahora más necesarios que nunca para denunciar.

Comprendo que cada uno tiene sus preocupaciones. Pero, si se me permite una anécdota, ayer estaba viendo Pasa Palabra, y pregunta el presentador a una de las concursantes: “¿y tú, para qué quieres el dinero?”. Y decía ella: “yo me quiero ir a esquiar, pero no sé si me llegará”. Y le dice el presentador: “hombre, tienes 9.000 euros”. Y al siguiente concursante le pregunta: “¿y tú qué harías con el premio?”. Y dice: “yo me quiero comprar dos casas”. El señor ya tenía una, pero quería dos más. Entonces, tú comparas esto con lo que he visto en Malí, o la situación de los refugiados en Siria -que puede convertirse en el grupo de refugiados más importante del planeta, donde los niños no tienen nada con lo que sobrevivir-, y piensas en llevarte a estos dos señores a un campo de refugiados para que hablen con esos niños y vean que las prioridades de sus vidas están equivocadas.

martes, 5 de marzo de 2013

Los reporteros de guerra están hechos de otra pasta



Hace unos minutos la reportera Mayte Carrasco, y el fotoperiodista Samuel Aranda (premio World Press Photo 2011), ambos dedicados a cubrir conflictos armados, han compartido sus experiencias, sus consejos y sus impresiones en el coloquio Friends Of Talent. Y sólo puedo decir una cosa: los reporteros de guerra están hechos de otra pasta.

Ambos trabajadores freelance, han contado desde cómo pagan los gastos que supone cubrir una guerra, hasta cómo deciden qué conflicto cubrir o cómo actúan en mitad de un bombardeo para tener siempre presente que están ahí para informar. Esto es lo que han contado: 


Pregunta: ¿Es difícil ser freelance?

Samuel Aranda: “Si alguien aquí quiere ofrecerme entrar en nómina después de esto, luego hablamos (risas). Es muy difícil conseguir un contrato, y bueno, de esta manera eres un poco más libre sobre la manera de trabajar. Ahora tengo la opción de proponer temas y de que me escuchen”.

Mayte Carrasco: “La profesión del periodista es una carrera de fondo. Porque vayas a una guerra con 22 años y te publiquen tres fotos no significa que vayas a vivir del periodismo para siempre. Hay que estudiar mucho, trabajar muy duro y sacrificar muchas cosas. Por eso hay que creer en esto y tener mucha vocación”.

Pregunta: Tal y como está la crisis en el periodismo, ¿hay que saber de todo para seguir en esta profesión?

Mayte Carrasco
Mayte Carrasco: “No. Yo sé escribir y contar. He tenido que grabar para sobrevivir, y bueno, pues sufre la calidad de la noticia”

Samuel Aranda: “Yo soy muy crítico. Me gustaría saber qué significa la crisis del periodismo, a nivel global. Porque yo he tenido reuniones en medios españoles y ahora tienen más beneficios que en 2004. Pero te vas fuera, y por ejemplo en The New York Times, ves que están reestructurando y apostando más por la calidad. Por ejemplo, que un fotógrafo vaya acompañado de un periodista. Yo creo que aquí, en España, llegará el momento en el que se apostará por la calidad”

Pregunta: ¿Por qué en España es diferente la situación de los periodistas?

Mayte Carrasco: “Aquí el periodismo sufre la guerra entre la izquierda y la derecha. En los medios se ve perfectamente de qué lado son, y se premia incluso a los que echan a periodistas de cadenas públicas porque “se le veía el plumero”. Además, en Francia por ejemplo, Le Monde cita a Le Figaró sin problema, cosa que en España nunca se ve que El País cite a El Mundo, o viceversa. En España no se premia al periodista objetivo. Sólo se le compra cuando habla de internacional y no toca la política española. Además de que un periodista que es precario es más manejable”.

Samuel Aranda
Pregunta: ¿Es Google un rival para un reportero freelance?

Mayte Carrasco: “El gran problema es internet y lo que está pasando ahí con el periodismo. El lenguaje del periodismo se ha adaptado a internet, y no al revés”.

Samuel Aranda realizó para The New York Times el reportaje fotográfico "En España, austeridad y hambre" en el que retrata la realidad de los sectores más desfavorecidos y las protestas ciudadanas en España desde el comienzo de la crisis. Muchos medios españoles le criticaron duramente por dar mala imagen de la "Marca España". Sobre este tema, Aranda ha comentado que “tiempo después, Cáritas sacó un estudio sobre la situación del país, con datos más duros, y esos mismos medios, dos semanas más tarde, alertaban de la situación de España. ¿Porqué se nos crítica a los de fuera? No se entiende”.

Pregunta: ¿Cómo organizáis la cobertura de un conflicto?

Mayte Carrasco: “Lo más importante es llegar lo antes posible, antes de que cierren las fronteras. Desde Siria viajo con una mochila, dos camisetas y poco más. Por razones de seguridad me pongo hiyab para no llamar la atención. Intento vestirme como se viste la gente en esos países, y prepararme sobre el conflicto, porque cada uno es completamente diferente, aunque los sentimientos de fuerza, de miedo a la muerte o de ganas de sobrevivir, son los mismos. Tienes que saber quién es quién, conocer los bandos y  buscar a traductores que te ayuden”

Foto ganadora del World Press Photo 2011. Samuel Aranda.
Pregunta: ¿Habéis tenido miedo alguna vez durante un conflicto?

Samuel Aranda: “Para mí lo más duro es ver lo que importa una víctima dependiendo del bando en el que vaya. La vida humana tiene un valor diferente, dependiendo del lado del que estés”

Mayte Carrasco: “Muchas veces. En las revoluciones árabes, desde que empezaron en Egipto, he pasado miedo en varias ocasiones, pero sobre todo en Homs. Como el momento en el que hirieron a Roberto Fraile. Estaban cayendo 500 bombas al día. Da mucho miedo. Recuerdo el dormir y despertarme con la primera bomba a las 6 de la mañana, y saber que ese día iba a morir mucha gente inocente. Y sin que nadie haga nada”.

Pregunta: Sin periodismo no hay democracia, ¿llega eso a la gente en la calle?

Samuel Aranda: “No lo sé, cada uno tendrá su opinión. Cualquier profesión tiene su importancia en la sociedad, y no creo que seamos tan diferentes de un bombero o un policía, en términos de riesgo. Y a ellos no les dan premios, ni les invitan a conferencias”

Mayte Carrasco: “Lo importante es que el periodista corre la misma suerte que la población local. El año pasado murieron 90 periodistas. Los conflictos, y las condiciones precarias, han cambiado. Pero creo que el periodismo es muy necesario. Por ejemplo, el 22 febrero se lleva a cabo una campaña llamada “A day without news”. ¿Qué pasaría si no llegaran noticias durante todo un día? En España nos miramos demasiado el ombligo, y sólo hablamos de que estamos muy mal. Hay que ver más allá, hay que apreciar la vida y la suerte que tenemos. Yo he aprendido de los sirios de esa fuerza interior para salir adelante”

Pregunta: ¿Qué opináis de las redes sociales para comunica?

Samuel Aranda: “Yo creo que son modas. Cuando empezó Twitter se puso muy de moda coger fotos de ahí. Pero ahora ya casi nadie coge noticias de Twitter, y menos los medios serios. Son modas y al final yo creo que la gente escoge calidad”

Mayte Carrasco: “Los ciudadanos de esta manera cuenta cosas gratis, y los medios lo han visto como un filón. Un periodista ciudadano no existe, es un testigo de la realidad. Pero eso no le hace periodista. Un periodista es un profesional, que ha estudiado y se ha comprometido con la ciudadanía en contrastar todos los puntos de vista y dar una visión global. Como dice un amigo, Twitter es la barra de un bar. Y los medios ahí se han perdido. Pero hay que volver al camino del periodismo real”

Pregunta: ¿Hay que negarse a trabajar sin cobrar?

Samuel Aranda: "Cuando tienes 18 años, tienes mucha ilusión por publicar, por ver tu nombre en la noticia. Entiendo que haya un periodo de prácticas. Pero después tienes que profesionalizarlo. Trabajar gratis es tirar piedras sobre tu propio tejado. Creo que muchas veces somos nuestros propios enemigos, pensando en que es difícil ir a algo mejor. Y no, hay que intentarlo”

Pregunta: ¿Qué aporta la mirada de una mujer en la guerra?

Mayte Carrasco: “Lo mismo que la de un hombre. El gran problema está cuando regresas. Cuándo ves que todas las páginas de opinión están escritas por hombres. Al principio sólo me invitaban a sitios para hablar sobre la reportera de guerra en zona de conflicto, y yo decía: ¿por qué no me invitáis para hablar sobre Afganistán? Y en el grupo de reporteras de guerra nos damos cuenta de que aún hay mucho machismo. También en las redacciones españolas, sobre todo para enviar a mujeres con hijos. Y es que es toda una ventaja. Porque, por ejemplo, en los países árabes muchas veces podemos entrar al mundo de las mujeres, hablar con ellas, y eso no es fácil. Y es que muchas veces me dicen: 'Mayte, mira que estás loca'. Y yo me pregunto: ¿Por qué Jon Sistiaga tiene muchos cojones y yo soy una loca?


Durante el turno de preguntas, entre las cuestiones planteadas, su opinión sobre las nuevas labores del periodista, la precariedad de la profesión o los momentos más duros han sido las más destacadas. 

Pregunta asistente: ¿Qué os supone trabajar de manera precaria?

Mayte Carrasco: “Ser precario te impide pagarte un hotel más seguro o pagar más “cash” en un chek point, algo que te puede salvar la vida. Por suerte contamos con Reporteros sin Fronteros que nos ayudan mucho con los temas de chalecos antibalas y esas cosas".

Pregunta asistente: ¿Creéis que es importante manejarse como community manager?

Mayte Carrasco: “Lo del community manager a mí no me llama nada la atención. Soy más de pisar el terreno. Pero puede ser una salida, aunque no para el reporterismo de guerra”

Pregunta asistente: Para Samuel, ¿qué foto se te ha quedado grabada?

Samuel Aranda: “Como yo no entiendo este trabajo sin involucrándome con la gente, hubo una época en Gaza, donde viví una temporada bastante larga, que vi lo que vale una vida dependiendo del bando en el que estés. Ese puede ser el momento más frustrante que he vivido”

Pregunta asistente: ¿Cuándo decides salir de una guerra?

Mayte Carasco: “En Siria iba para una semana y me quedé mes y medio porque cerraron las fronteras. En Malí terminé porque había mucha tensión, no teníamos mucho de comer, y me fui porque estaba muy cansada”.

Pregunta asistente: ¿Seguís el trabajo de compañeros españoles?

Mayte Carasco: "Sí, claro. A Ramón Lobo, Gervasio Sánchez…"
Samuel Aranda: “Si Ramón Lobo fuera americano tendría varios Pulitzer, y aquí le han echado de El País”.


Hablando sobre una de las experiencias de una de las asistentes en un conflicto en América Latina, Samuel Aranda aprovecha para definir lo que para él es un terrorista. “Hamas, en Gaza, los islamistas en Yemen…es muy fácil poner el término de “terroristas”, pero hay muchos matices. Hay gente que, por ejemplo, no quiere saber nada de los occidentales. Algo normal si llega un avión americano y mata a tu hijo, y claro, ahí ¿quién es el terrorista?”

Por último, Mayte Carrasco lanza un mensaje a todos los periodistas.“Pedimos un colegio profesional como los médicos o los abogados, donde haya que colegiarse, y parece imposible. Es vergonzoso que este país sea así. Tenemos que unirnos de verdad. Y cuando Rajoy hable a través de una pantalla, bajar las cámaras. Y hay que negarse a trabajar sin cobrar. Decid no, porque os va a dar el prestigio. Haceros valer, porque valéis mucho. Eso hay que enseñarlo y hay que cobrarlo. Hacemos una función pública, somos un pilar de la democracia y hay que unirse”.