miércoles, 9 de octubre de 2013

Una imagen vale más que mil excusas

Muchos, entre los que me incluyo, no conocen la triste realidad que viven los indígenas de México en todo lo referente al disfrute y al derecho de servicios básicos como la educación o la sanidad. Para algunos será “gracias a” y para otros “por desgracia”, pero sea como sea, el pasado fin de semana el periódico La Razón de México con tan sólo una imagen daba carpetazo a un millón de excusas.

El diario abría con la foto de una mujer dando a luz en el jardín de un hospital en México ante la negativa de los médicos a ser atendida. La imagen, de una crudeza tremenda, muestra a Irma López, de origen mazateco, en cuclillas con su hijo aún atado a su cuerpo por el cordón umbilical. Al parecer, y según el periodista Eloy Pacheco, quien publicó por primera vez la foto en la web Voz21, “el centro de salud carece de médicos para atender la amplia demanda de la población mazateca, por lo que ocurren casos como esta”.

La instantánea, que ya ha dado la vuelta al mundo, ha tenido más de una crítica. Según indica el Código Deontológico de la FAPE, sin perjuicio de proteger el derecho de los ciudadanos a estar informados, el periodista respetará el derecho de las personas a su propia intimidad e imagen. Además señala que en el caso de tratamientos informativos de asuntos en los que medien elementos de dolor o aflicción en las personas afectadas, "el periodista evitará la intromisión gratuita y las especulaciones innecesarias sobre sus sentimientos y circunstancias”.


Algunos medios, como ABC, han optado por publicar la imagen parcialmente para evitar herir sensibilidades. Sin embargo, la gran mayoría acompañan sus artículos con la fotografía original. ¿Necesita la sociedad de hoy en día imágenes como esta para pararse y mirar? 

Pues va a ser verdad que una imagen vale más que mil palabras. 

4 comentarios:

  1. Desde que vi la fotografía la semana pasada, entre el shock y la indignación, aún no tengo muy claro por qué postura decantarme: si por la denuncia pese a la crudeza de la imagen o por la deontología que tanto me empeño también en defender.

    Sin duda, es un caso complejo, en el que no atino a ver qué debe prevalecer: la intimidad de esta mujer o la denuncia (mundial) de su situación de indefensión a causa de unos servicios sanitarios politizados (fuentes mexicanas dicen que están en paro laboral y por eso no tienen personal para atender) y/o saturados.

    Quizá también hay que ampliar el prisma desde el que lo vemos. Creo que desde nuestra educación vemos atroz que esto pase. Es atroz el sólo hecho de verlo de portada de un medio... Pero nuestra sociedad no es la suya. La suya quizá está alzando la voz como puede para luchar por un mañana mejor, lo que implicará a veces saltarse los códigos éticos elaborados bajo otro criterio social. No es justo medir aquello con lo nuestro.

    Que no se publique esta foto no hará que deje de suceder. Y, tristemente, al revés tampoco. Mañana habrá otra mujer que no será atendida debidamente cuando necesite dar a luz... poniendo en riesgo su vida y la del recién nacido. Y quizá deberíamos volver a saberlo, igual de crudo, edulcorado, fundamentado con datos y estadísticas, cómo sea. Pero que lo sigan contando hasta que deje de pasar.

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    1. Gracias Ainhoa! Tienes mucha razón en lo que dices. Tal vez estamos intentando ver las cosas desde nuestro "cómodo" modo de vida, donde los escándalos son robos, EREs fraudulentos y cuentas en Suiza, sin darnos cuenta de que situaciones -para nosotros impensables- como no poder dar a luz en un hospital, ocurren en países tan "avanzados" como México.

      Y aquí vuelvo al punto de partida, ¿hasta dónde llega el derecho a informar? Es una línea demasiado fina.

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  2. Fina y traicionera... 100% de acuerdo. Mira lo que pasó en julio con el accidente de Santiago... o cómo se está tratando en muchos medios el tema de Asunta. Hasta a nuestros medios, que tan bien se supone que conocen los libros de estilo, se les va de las manos.

    Pero me encanta encontrar a gente que se da cuenta y que lo pone sobre la mesa para debatirlo ;) ¡Siempre es un gusto leerte!

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